El presidente de Murcia, López Mentiras

Ultimamente cuesta mucho explicar las cosas porque triunfa el espectáculo pero cada vez es más necesario buscar la verdad para evitar los juegos políticos de las mentiras o las medias verdades a las que se recurre casi siempre y como ya es habitual para obtener ventajas políticas. 

Esta vez es el presidente de Murcia, Fernando López Miras, quien se dedica a exagerar extraordinariamente una decisión que, sí o sí, va a tomar el gobierno de Pedro Sánchez para que se haga un poco, solo un poco de justicia con el Río Tajo. López Mentiras hace un poquito de política exaltada y barata para conseguir el apoyo incondicional y enfervorizado de los murcianos a los que asegura va a defender “donde haga falta, cuando haga falta y como haga falta”. Olé, el defensor de los sedientos, sigamos todos al abanderado en el desierto.

La verdad es que no hace tanta falta defender a su pueblo como asegura y miente al decir que “el plan del Gobierno central… no solo pone en juego el agua para que la Región de Murcia pueda desarrollarse, "sino que está en juego el agua de nuestros hogares y para beber".

Un poco de tranquilidad, señor Mentiras que no es para tanto. La decisión ya está avalada por unanimidad del Consejo Nacional del Agua y falta la ratificación del Gobierno. Se trata de rebajar la cantidad que debe trasvasarse cada mes del Tajo al Segura, de los 38 hectómetros cúbicos actuales a los 27. Y se ofrecen alternativas para complementar los 11 hectómetros cúbicos restantes con agua desalada. 

No se trata, señor López Mentiras, de acabar con el trasvase que es lo que de verdad defendemos y deseamos desde nuestra tierra. Ni acabar con la economía de Murcia, basada en buena parte en un negocio privado que necesita mucha cantidad de agua que no tienen en la región y no sobra en Castilla-La Mancha.

No está en juego el agua de sus hogares como si lo ha estado durante muchos años el de municipios de Castilla-La Mancha que veían pasar el agua del trasvase mientras se abastecían sus hogares con camiones cisterna. No es verdad que se trate de una decisión política sin aval de los técnicos porque todos los técnicos, excepto los paniaguados de la región de Murcia, y todos los informes de la Unión Europea coinciden en que es absolutamente necesario, ante la siempre precaria situación del río debido a los abusivos trasvases y el cambio climático, es necesario ya elevar los caudales ecológicos del Tajo para que el río sobreviva. 

Causa sonrojo que el señor López Mentiras diga que la medida se toma sin consenso cuando la obligación actual de trasvasar cada mes 38 hectómetros cúbicos nace de una ley aprobada solo por políticos del Partido Popular con la firma vergonzosa de la que por entonces era presidenta de CLM, María Dolores de Cospedal. Esa sí fue una Ley política abusiva y adoptada sin el acuerdo de la cuenca cedente, es decir Castilla-la Mancha y los Municipios Ribereños. Un ley que vino a poner la puntilla al Río Tajo y que ahora va a suavizarse.

Señor López Mentiras: puede usted hacer uso de la exageración para atacar al Gobierno del Estado, a Castilla-La Mancha y para recibir el apoyo entusiasta de toda la población de Murcia, pero ya está bien de buscar votos levantando a la gente porque ese nacionalismo lleva a un enfrentamiento innecesario entre las regiones que tenemos el deber de alcanzar acuerdos adaptándonos a las nuevas situaciones, a la razón y en particular a la verdad, sin populismos ni exageraciones.

elObservadorCLM